De los creadores de What Comes After nos llega ahora a Nintendo Switch Hello Goodboy, un título que nos llega solo en inglés sobre la importancia de la vida, las buenas acciones y un mensaje muy positivo que, además tiene un perro con el que puedes hablar y jugar cuando te apetezca.
Hello Goodboy Coco
En este juego encarnamos a un “niño” llamado Iko que, junto a un perro llamado Coco, recorren un mundo misterioso llamado Kuturo que parece ser algo parecido al más allá. La idea es ser un buen chico, disfrutar el viaje y llegar al final.
La historia nos plantea cuatro grandes escenarios y un jefe final tras completar cuatro grandes decisiones. Sin embargo, en una partida solo podemos elegir dos escenarios (representados por las estaciones del año), y si queremos ver todo, nos tocará jugar varias partidas (ya sea por decisiones o simplemente por visitar todas las estaciones).
El juego es algo corto, pues en menos de 5 horas hemos podido completar todas las estaciones. Sin embargo, el final en sí del juego es casi el mismo sin importar la ruta y los diálogos iniciales hay que repetirlos en las sucesivas partidas, lo cual le quita algo de motivación a rejugar.
Estaciones y la vida
A la hora de jugar encontramos que este título está hecho para un público muy específico: familias con niños que quieran enseñarles algo sobre la muerte. Esto es así porque la manera de hablar de los protagonistas tiene un vocabulario muy básico y una manera de hablar que parece dirigida a niños, pero sin embargo la temática (y el idioma en nuestro caso) requieren de un adulto que ayude a entenderlo (y a que le quite la importancia a aspectos relacionados con la alimentación de mujeres que están mal representados). Eso no quiere decir que el resto de gente no pueda disfrutar de esta aventura narrativa, pero no le sacarán todo el provecho.
La jugabilidad en sí es bastante sencilla, es un walking simulator con decisiones en los diálogos, muchas conversaciones y “cenas con personajes” y algún que otro minijuego o combate basados en pulsaciones de botones o pequeños puzles para resolver los problemas de la gente que encontramos. Todo es bastante simple, por lo que la dificultad es realmente baja en todo el trayecto, lo cual lo hace ideal para que sea el más pequeño de la casa el que tenga los controles.
Respecto al aspecto audiovisual encontramos un estilo artístico bonito y colorido, y seguramente sea de lo más destacado del juego. El sonido acompaña bien a las emociones y a los protagonistas, pero tampoco es algo que sea demasiado llamativo.
En definitiva, en Hello Goodboy hay un buen mensaje escondido detrás de algo muy sencillo que falla en no tener su target mejor definido y en la manera en la que se expresan los diálogos. Algunos temas no terminan de estar bien presentados y en general puede haber confusión, por lo que sí o sí es algo que deben jugar padres y niños juntos, en cuyo caso la experiencia puede ser algo más positiva.
Versión del juego analizada: 1.0.0
